Joder, me ha dado por escribir de música ultimamente. El caso es que así por casualidad me he enterado de que uno de esos grupos de cuando yo era chavalote se han vuelto a juntar y, en estos días inciertos que diría el Cifuentes, se han tirado a la aventura de sacar un disco.
Como lógicamente, salvo los escasos lectores allegados que tengo, ninguno de mis entrañabilisimos lectores y lectoras y lectoros (para que nadie se ofenda) los conoce, os contaré un poco la historia.
Corrian los ochentas y en aquellos tiempos de roncanroles y cervezas el denominador común entre los colegas era una pasión desmedida por la música. Tanto es así que quién más quién menos intentaba hacer sus pinitos en el rollo. Unos con más y otros con menos fortuna, según fuera también mayor o menor el talento.
Corrian los ochentas y en aquellos tiempos de roncanroles y cervezas el denominador común entre los colegas era una pasión desmedida por la música. Tanto es así que quién más quién menos intentaba hacer sus pinitos en el rollo. Unos con más y otros con menos fortuna, según fuera también mayor o menor el talento.
De todo aquello salieron la de Dios de grupos, entre ellos Barricada que ese si conoceís. En un principio y con el fallecido Mikel a la bateria creo que se llamaban Cafarnaún, fijate (Este es un apunte innecesario con el único objeto de dármelas de listillo, ya sabeis como soy).
Otro de los grupos que destacó a nivel local era Linea 2. Con un rock fresco, muy en la linea de gente como Asfalto o Topo -no en vano Emilio, lider del grupo, es un fan incondicional de estos- se ganaron la simpatía y el apoyo de su público.
Otro de los grupos que destacó a nivel local era Linea 2. Con un rock fresco, muy en la linea de gente como Asfalto o Topo -no en vano Emilio, lider del grupo, es un fan incondicional de estos- se ganaron la simpatía y el apoyo de su público.
Empezaron poco a poco, a base de horas y horas de ensayos y acabaron siendo los ídolos de todo un barrio. No he visto yo legión de seguidores más fiel. Allá donde tocasen, allí estaban todos. Como si alquien fuese a pasar lista.
Triunfaron entre los suyos, ganaron varios concursos e incluso llegaron a grabar un disco y de repente un mal día desaparecieron. Alguno de ellos volvió a probar fortuna y de hecho la tuvo con otra formación. Un grupo que hacían versiones de los clásicos: desde Pink Floyd hasta Supertramp, y que llenó locales y salas por toda Navarra. Aquello tampoco cuajó y desde entonces no volví a saber de ellos.
Ahora, 25 años después, han vuelto a ponerse frente a los mismos fieles seguidores. Frente a los que estuvimos siempre y frente a todo aquél que los quiera descubrir. Volveremos a viajar en la Linea 2. Mucha suerte.
Por si a alguien le interesa: LINEA2
Estos son unos rudimentarios "videoclips" que les hicieron en TVE Navarra allá por los ochenta.